Tuesday, August 08, 2006

Los Fenicios 1556

Mi primo Nico me contó que salió con una niña que vive en la villa donde yo crecí. Me fui de la Villa Patricio Lynch ( o Villa Capri) de Maipú a los 16 años. Estaba saliendo de cuarto medio. Casi 10 años después aún no me siento tan a gusto en la Ciudad Satélite. No siento tan mío este lugar como esa casa de dos pisos. Será porque aquí no he construido amistades como las de allá. El lugar donde crecí queda en el pasaje Los Fenicios 1556. Es la segunda de cinco casas apareadas, yendo de norte a sur y mirando a la costa.

A pesar de todo, no vivo de los recuerdos. Nunca he vuelto a mi casa antigua. Aunque en ello reconozco un poco de miedo. Quizás no me quiero encontrar con la sorpresa de que no he cambiado tanto como ellos piensan, o quizás ellos están tan diferentes que yo no los reconozca. O quizás todo esté igual, que sería peor.

A esta hora no puedo escanear alguna foto de esos tiempos, pero lo haré. Por mientras, Google Earth me ayudó a ver de nuevo mi antigua casa.

Pero también me puse busquilla. Navegando por la red encontré un correo que sería de uno de los amigos más entrañables de mi infancia: El Christian debió ser mi primer compañero de fechorías infantiles. Ojalá me responda. Sería bueno saber qué fue de tanta gente que de vez en cuando recuerdo.

2 comments:

Gabriel Mérida said...

a mí hace poco me contactó un amigo de la infancia... de mi hno. o sea, no amigo mío, sino de mi hermano. Raro, ¿no?

saludos Seba

Peter

Anonymous said...

ami tambien me contacto un amigo de la infancia, desde el jardin a quinto basico, eramos los mejores amigos. Luego me cambien de colegio y nunca mas lo vi. Simpre lo recordaba hasta que hace unos meses me contacto. Como nos ha cambiado la vida, hasta la mirada de simples amigos ya no es la misma, creo que ya no solo nos vemos como amigos.....eso es muy raro.

Florencia.