Thursday, October 27, 2005

“Alegría Alegría” o Vino y me empapó

Les deseo que nunca les pase esto. Bueno, a mis enemigos sí. Pero ¿tengo enemigos?, la verdad no tengo idea. Si alguien se considera uno, por favor postéeme.

No sabía qué hacer. Era una tragedia para mí, pero debía tomármelo a la ligera, como un chiste. Él era un niño y los niños son inocentes. No saben lo que hacen. Sólo piensan en jugar, sin medir las consecuencias. No como nosotros, que nos fijamos en lo que dirá el otro.

Yo sonreía, pero la rabia me comía por dentro. Era una sensación de impotencia. No podía retar a una guagua por lo que hizo.

Todos me miraban sorprendidos. Con la expresión de sus rostros me decían, “¿qué le vamos a hacer? El Francisco es así.” Más encima, yo era uno de los protagonistas de esa tarde. Veníamos llegando de la ceremonia de bautizo de la Natalia, una linda niña que ahora tiene 5 años, de la que yo era uno de sus padrinos. No había manera de evadir la situación. Me moría de vergüenza.

Y para peor, estaba la otra Natalia, mi polola, que en ese día hacía una especie de “presentación en sociedad”, ya que era la primera vez que enfrentaba a la parte de mi familia que no siempre visitamos. Las tías peladoras, ésas que hablan en clave “punto cruz”; las que, apenas te ubican, te aprietan los cachetes diciendo “¡que está grande usted mijito!”; los tíos desubicados que preguntan por las pololas pasadas y todo aquel miembro del clan que, por alguna u otra razón, no está en la lista de los parientes favoritos. Cuando pasó todo, ella estaba al lado mío.

Mi tenida, en un segundo, pasó de recién estrenada a ropa de diario. Ésa que no importa si tiene alguna mancha de pintura o está desteñida, total sirve para estar en la casa. De tanto insistirme, mi mamá me había comprado un atuendo digno de para la ocasión, pero a su gusto: pantalones beige, camisa azul, zapatos y una corbata. Me sentía un dirigente de la UDI. Lo triste es que todo le había salido un poco caro y, gracias a la mala suerte -y a Francisquito- hasta ahí había llegado su sueño de verme peinadito y arregladito como ella siempre quiso.

Es que el vino no sale fácilmente de la ropa. Unas cuantas gotas sí, pero mi caso era un tanto diferente. Yo había sido rociado con Cabernet Sauvignon. La camisa, la corbata, los pantalones, los zapatos. Todo estaba mojado. Podría decirse que me empapé de las Misiones de Rengo.

¿Cómo paso? En el living de la casa donde celebrábamos, Francisco, uno de mis primos mas pequeños, de la misma edad que a Natalia, jugaba con un globo de color rojo como si éste fuese una pelota, cosa que hacen los niños, sobre todo cuando tienen una obsesión con el fútbol y los balones. Recién habían pasado los brindis de rigor y estábamos sentados partiendo las conversaciones. Francisquito se divertía con todos e incluso yo le lancé algunas veces el globo para que le pegara. Nadie se daba cuenta de riesgo que se corría con un niño jugueteando de esa manera y con gente adulta con copas de vino recién servidas. No entiendo cómo, entre tanto papá y mamá presente, nadie pudo oler la tragedia.

Hasta que la tragedia llegó, amarga para mí, como un mal vino.

En el segundo fatal, estaba hablando de música con mi tío Enrique, un maestro del show familiar. Guitarrero y cantante como pocos. Yo sostenía una copa llena de vino en la mano derecha. Sólo había bebido un poco por el brindis. De pronto, un golpe justo en la mano que tenía la copa y no alcanzo a reaccionar, cuando me sentí empapado. Sentí lo mismo que cuando una ola se pasa de lista y te moja justo mientras duermes en la arena. En esa ocasión, la ola era de vino.

También recibieron lo suyo el sillón y la alfombra blanca recién lavada. Recuerdo que escuché dos cosas. La voz de mi papá exclamando: “chuuuu” y la de la de una mujer que no reconocí que gritó de lejos: “ya, alegría alegría”.

A Francisco no lo retaron. Sólo lo tomaron de la mano y se lo llevaron rápidamente de la escena, como escondiéndolo. Quizás fue mi tía muerta de vergüenza. No sé. Sólo recuerdo que no vi más a mi “primito”.

Por suerte mi casa quedaba cerca de la celebración y pude cambiarme de ropa. Apenas me alejé unos metros de la residencia de mi tía, pude descargarme. - “¡¡puta la weá!!” – gruñí.

Traté de salvar lo más que pude la ropa nueva. Todos los trucos caseros que se me ocurrieron, los realicé: sal, lavalozas, agua mineral, hasta la remojé en cloro, pero no se pudo. No se recuperaría nada.

Para no echar a perder el momento, intenté vestirme otra vez con pantalón y camisa, pero ya no era lo mismo. Ahora el traje era negro, la camisa blanca y no usaba corbata. Definitivamente no era lo mismo.

Volví al bautizo y una tía despistada me preguntó porqué me había cambiado ropa si estaba tan lindo. Yo preferí hacer como que no escuché y me fui a sentar a la mesa. Para mi sorpresa, Francisco siguió jugando con el globo rojo, como si nada, y todos le seguían la corriente. Quizás asumieron que como preferí quedarme callado y no decir nada, todos debían hacer lo mismo. Tomarlo a la ligera, como un chiste.

Friday, September 23, 2005

Carlos Teodoro

Éste es el nombre de mi abuelo. Una persona demasiado importante para mí. Él lo sabe de sobra. Lo he entevistado un par de veces y de esas conversaciones voy a sacar unas frases escogidas, como un homenaje en su cumpleaños número 75.


"Hay que estar siempre en movimiento, haciendo algo, si no te aburres. Ves televisión, un rato, una hora, y te aburrió. Tocas guitarra otra media hora, te aburrió. Lees un rato y listo. Y empiezas a darte vueltas. ¡Chuuu!...Interminables esas vueltas."


"De repente uno hecha de menos, no para ponerse a llorar, pero se hecha de menos. Por ejemplo un domingo, almorzando los dos solos con la vieja. Antes, siempre había un nieto aquí, un hijo allá. No faltaba. Y ahora almorzamos, conversamos lo necesario y ya está. Yo por eso a veces me compro mi cajita de vino para salir de onda. Ahí me pongo más alegre."


"Parece que el hombre no sufre, pero algo siente."


"Hacía la cimarra con mis amigos. Íbamos al río Mapocho a bañarnos en verano. En esos tiempos el Mapocho estaba limpio, y en el invierno salíamos a pasar la hora por ahí. Al cine. Estaban los rotativos. Empezaban a las nueve de la mañana y terminaban a las doce de la noche. Valía diez centavos la entrada. Podías estar todo el día. Llevaba pan y chancho para adentro y lo comíamos."


"Lo pasaba bien con la pelusá: El pat’e lancha, el 'chico e’ la nariz', 'el barata' . Todos tenían sobrenombre. A mí me decían el 'rucio'. Todo el pelo que se me ha caído era medio amarillo."


"Un chalequito por allí, unos zapatitos por allá. Demasiado pobre no era, pero el frío queda marcado, no se olvida nunca. Esa era la niñez. "


"Después de la pega era puro juaneteo. Íbamos a cachurear al río. La vida era el río. Venían a botar los escombros de las construcciones. Traían pedacitos de madera, fierros, todo lo que es cachureos. Éramos un grupo de cabros que juntábamos cosas y ahí mismo las vendíamos. La leña la llevábamos para la casa, para la cocina y teníamos plata todos los días. "


"... entré a las divisiones inferiores del equipo de mis amores, el Magallanes, donde jugué de centro foward. Era bueno, pero no seguí jugando cuando grande. No tenía gente que me apoyara. Mi papá no me pescó mucho."


"Hay un dicho muy sabio: 'nadie nos enseña a ser padres', y es verdad."


"Y todavía la quiero. La conocí cuando era chico. Frente a mi casa del barrio Yungay pasaba una chiquilla que le iba a dejar el almuerzo a su papá. Yo me subía a la pandereta y le silbaba. Ella me hacía un desprecio. En ese tiempo se usaba eso para que nosotros las siguiéramos conquistando."


"En los tiempos de la UP, antes del “pronunciamiento”, o eras izquierdista o eras de la Democracia Cristiana o eras momio. Había que definirse. Yo me fui por la Izquierda. Así, aparte que era media ideológica la cosa, se conseguía más pollo y más azúcar. "


"Inventé un jabón súper bueno. Se llamó "Jabón Toqui" y tenía una aviso en la radio que decía :'Economía y limpieza, Jabón Toqui en su alteza'. Fue muy famoso mi jabón."


"Cuando nos reuníamos frente a la fogata, en el terreno que compramos a medias. Entre las cabañas que construimos de a poco y cantábamos las zambas de Los Chalchaleros o 'Las Playas de San Sebastián', era feliz, muy feliz. Porque veía que todos estaban contentos. He soñado varias veces con los cuatro tocando de nuevo allá. En una de esas me voy luego a verlos, antes de lo que creo."

La sabiduría de los viejos y sus historias son siempre una inspiración...¡feliz cumple abuelo!

Sunday, September 11, 2005

11 de Septiembre

No encontré otro título más apropidado para este post. Vengo de la radio, no me pidan mucha creatividad un domingo a las doce de la noche.

Hoy estuve todo el día atento a las muchas ceremonias que se realizaron -de un lado y del otro - para recordar la gloria de Allende o Pinochet, todo depende del gusto de las personas.

En fin, traigo esto a colación porque esta semana fue de mucha reflexión interna respecto a esto del 11 de septiembre y todos los factores que cruza. Además, me inscribí en los registros electorales, por lo que todo confluyó para que escriba este texto. No tengo otra cosa en la cabeza.

Y es que lo que pasó el jueves en el campus Juan Gómez Millas me hizo repensar el asunto. Fui testigo de cómo los policías entraron a la Úniversidad, rociaron con una especie de ácido la cara de un alumno de sociología y tiraron bombas lacrimógenas a personas que, antes de que los pacos entraran, estaban en clases o en los pastos viendo cómo los encapuchados tiraban cosas. O sea, gente inocente. Una de ellas le partió la cabeza a una niña. Se llama Erika Jamett y estudia antropología.

Un dato relevante es que el procedimiento para lanzar lacrimógenas dice que éstas se deben apuntar a 45 grados hacia arriba. Acá los "efectivos" lanzaban de frente.

Esto es muy fuerte. Los que me conocen saben que yo nunca he estado de acuerdo con los encapuchados. No me gusta su forma ni su fondo. Su lucha me parece barata y falta de contenido, falta de todo. Y siempre que escuchaba la típica frase de que "la policía nos reprime con violencia" mi cabeza tiende a inclinarse hacia la postura que dice que los carabineros responden a las probocaciones: "si los encapuchados huevean, los pacos van a responder".

Pero ese jueves le dio -en parte- la razón a quienes protestan. Apenas tiraron las lacrimógenas, muchos de los que estaban echando a los carabineros - insisto, a cara limpia- comenzaron a tirarles piedras. Yo no estaba precisamente ahí, pero un amigo (saludos Florit)me dijo que "daban ganas de hacerlo".

Y es que de verdad daban ganas de romper con la impotencia que acciones como esta causan. La policía aprovechándose de su rango de "autoridad", de sus pistolas lanzabombas, de sus trajes acondicionados y del típico miedo que nos dan los pacos, para aprovecharse y jugar con nosotros. Sí, jugar a que ellos son bacanes y que tienen la facultad de llevarnos detenidos a pito de nada o pueden trarnos bombas lacrimógenas sin sanciones reales.

Si nos escandalizamos por estas cosas ¡Cómo debió ser antes!, cuando se pelearon cosas realmente importanes. Cuando eran todas las fuerzas armadas las que estaban pendientes de tí. Cuando la CNI, la DINA y los milicos perseguían a personas, los torturaban, los mataban y hasta los lanzaban al río. Si algunos sentimos un poco de miedo, eso no es nada con el terror de esos tiempos. de sólo pensarlo se me aprieta la guata.

((Un paréntesis)) Revisando las fotos de ese día, las lacrimógenas fueron como de picao, no? Yo creo que se sentían tan invadidos por los muchos estudiantes que salieron de las salas para echarlos de la U, que no resistieron más los "¡fuera, fuera!" y de puro miedo y humillación atacaron.

Nunca me había sentido tan impotente frente a la acción de "la autoridad". Ahora que lo pienso, la impotencia lleva a veces a las reacciones violentas. Como actuar a rostro cubierto tirando piedras. Mejor me quedo callado. "Nunca digas nunca", afirma el adagio.

Saludos






Saturday, August 27, 2005

¿Cuanto cuesta sacar un medio?

Este es un texto que escribí hace un tiempo para un portal llamado estudiantesdeperiodismo.cl, lo reciclo ahora porque ando como en esta onda, quiero hacer cosas. Quiero hacer crecer mi revista.

Hay que tener muchas ganas. Esa idea romántica de hacer algo más que estudiar en la Universidad, tratar de aportar de alguna forma al debate, o simplemente llenar la necesidad de expresión, todo eso se mezcla para que surja recién la idea de hacer un medio de comunicación y más encima a pulso, como son las cosas cuando una apenas tiene para la micro y la chela semanal.


Y luego hay que formar equipos, personas que se comprometan a hacer cosas. Si las encuentras fácilmente, tienes suerte. Si son tus amigos, mejor. Y si encuentras más de 5 es fantástico. Todos pasamos por el maldito trauma de tener un grupo grande los primeros días y a la próxima semana queda la mitad, y a la siguiente quedan dos o tres. Esos días uno cree que todo va a salir mal, que el proyecto fracasará.


Pero extrañamente las ganas se van haciendo más grandes, es como si un pepe grillo te gritara en el oído ¡trabaja! y te llenas de ganas de sacar adelante esto, quizás para demostrarle a los que te dejaron botado después de la primera reunión que se podía hacer algo más que estudiar y que se perdieron la oportunidad.

Pero nuevamente llegan los inconvenientes. Que la plata, que las cosas de la U, el dormir poco, el sacarse la cresta arreglando pequeños detalles, que los textos no llegan a tiempo, que están malos y hay que editarlos, que el día de publicación hay una prueba, etcétera, etcétera. Ahí hay que elegir, entre sacarte una buena nota y no hacer el proyecto o sacarte una nota salvando el ramo y hacer el proyecto. Los que sacan las cosas adelante, en el común de los casos, eligen lo segundo.


Hasta que ves terminada la guagua, el primer número, la primera edición, la portada, y te sientes orgulloso de ella. Tanto trabajo, tantas noches de poco dormir, tantos carretes planeando esto. Por fin está lista, ahora solo queda mostrarla. Se la enseñas a tus amigos antes que al resto, para que opinen, todos te dicen que está bien y te felicitan, aunque sospechas de los comentarios. Es de mal amigo decir que algo no está muy bueno el primer día, ¿no?

Así llega el día del estreno, la salida al aire, el lanzamiento oficial. Se siente lo mismo que en alguna obra de teatro. Cosquillas en la guata, ganas de que todos lo vean de inmediato para recibir comentarios, un poco de vergüenza de saber que todo el mundo está mirando una creación tuya; y miedo, mucho miedo, a que se rían de ti, a que pase algo inesperado y todo se caiga, a que alguien no te pesque mucho. Es como un temor a que a tu guagua la encuentren fea o “mas o menos nomás”.


Pero ya está listo todo, la gente la está leyendo y juzgando. Y tu revisas todo, la miras...y de repente la peor duda de todas: ¿esto es lo que quería?. Lo que se tenía en la cabeza era algo que iba a cambiar la forma de hacer un medio, pero como que resultó a lo mismo. Sientes que la guagua no es tan bonita como la planeaste. Sientes que te faltó algo, quizás todo, le encuentras miles de errores y te maldices de no haberla revisado una vez más. La guagua de nuevo es fea, pero igual la quieres y darías la vida por ella.

Y así pasa en todos lados, con todos los proyectos y con todos los medios de comunicación de estudiantes. Son pocos los que se mantienen después del primer número. ¿qué los mantiene vivos? Pepe Grillo, la insatisfacción de haber trabajado tanto y lograr menos de lo que esperabas, las ganas de que todo salga perfecto, la quimera de que realmente vas a cambiar algo en la gente, los comentarios de gente desconocida que te felicita, los comentarios mala onda, los que al tercer número no te conocen. Y trabajas por ellos y por ti y por esa idea loca y romántica de cambiar el mundo.


PD: lean la revista sobrehumanos :)

Monday, August 22, 2005


"El periodismo es una mierda, un oficio de mierda"

Estas fueron las primeras palabras de Mirko Macari, alguien que goza de la provocación. Una especie de Marqués de Sade que busca torcer nuestras entrañas en todo momento, revolver nuestro estómago es su objetivo.

Y lo logra. Nadie queda indiferente y Mirko goza con ello. Goza porque dice lo que todos sabemos con una simpleza que nos cala los huesos. En un mundo llego de hipócritas y excesos de diplomacia, aparece Macari con su aguja sincera y nos clava en las venas su veneno de la verdad sin anestesia. Y eso nos encanta.

Como editor de La Nación Domingo -cargo que dejó- se propuso "cagarle el domingo a alguien", como le dijo un amigo. Y nuevamente le resulta, con una idea de hacer un periodismo más frontal, pero con bases. Pero - eso sí - nada de disparar a la bandada, ni atacar a por atacar, "hay que saber hacerse el muerto" es una de sus máximas. Esperar el momento preciso para morder a los poderosos, como lo hacen los buenos perros guardianes.

Para Macari, no hay periodismo sin no hay un poderoso en el otro extremo, es la única vía por la que se puede llamar periodismo a este oficio. La relación con el poder es lo que lo mueve para hacer lo que hace, a tomar este oficio de mierda y sacársela a quien realmente importa. Difícil postura la que toma, sobre todo cuando trabaja en un medio que es propiedad del Estado. "La vereda del poder es la del frente" dice Mirko convencido. Y así debe ser.

Pero el estar siempre en la vereda del frente mordiendo al poder tiene sus costos. Muchas veces ha pasado malos ratos con su labor. "No muerdas la mano que te da de comer" es una frase que Macari tuvo que conocer a la fuerza. Tenían preparado un extenso reportaje sobre la Ley de Pesca, donde se discutía la participación de los hermanos Zaldívar en las pesqueras.

Prontamente, desde La Moneda, se contactó al directorio de La Nación, el cual hizo llegar sus presiones hasta el director del medio, Alberto Luengo, para "bajar" el artículo. Mirko y su equipo decidieron renunciar. Sin embargo, su salida fue con elástico, pues acordaron un artículo del gusto de todas las partes. Así es la relación con el poder: "hoy estamos en un conflicto y mañana estamos en un negocio" dice.

Hay que saber vivir con eso, sobre todo en un oficio como este. Cuando una edición titula "Los Top Ten de la Tortura" y aparecen algunos de los hombres más poderosos de chile no es difícil que le lleguen dardos en contra; y llamadas telefónicas y presiones solapadas. En cierto modo se las buscan.

Pero todas estas presiones se generan por algo. Quienes reciben los golpes les duele. Como Nicolás Ibáñez, de la cadena D&S, quien tuvo que "secuestrar" toda una edición para tratar de evitar la difusión de un reportaje sobre su episodios de violencia intrafamiliar. Nunca se habían vendido tantos ejemplares.

Detrás de todo esto hay un negocio. El periodismo por más crítico y guardián del poder lo debe asumir. Mirko lo hace como todos os editores: "subirse a un polémica impopular no conviene". No queda otra que asumirlo y seguir siendo desfachatado. "Es un negocio y qué tanto" pareciera decirnos Mirko mientras nos mira con su sonrisa irónica, su aguda voz y su carácter desfachatado.

Por eso el periodismo es una mierda, porque es un negocio y qué tanto, porque detrás de la hidalga labor del contrapoder está el negocio y punto. Porque en Chile no queda otra que venderse un poco, aunque se luche por no hacerlo.

El "periodismo independiente" trata de surgir en un ambiente lleno de auspiciadores y pocos lectores, con la esperanza de transformarse en el futuro en un referente obligado de la gente.
El periodismo es una mierda, un oficio de mierda, pero nos encanta y a Macari También.

Thursday, August 18, 2005

Murió el Hermano Roger

"Una mujer mató el martes al Hermano Roger, de 90 años, durante el servicio vespertino de la serena comunidad de Taize, en Borgoña, conocida en el mundo por su consagración a la paz." dice una crónica informativa de hace algunos días. Yo acabo de saberlo hoy. Así de duro.

Y la noticia me conmociona, sobre todo cuando le sucede a personas que la verdad son mucho mejores que uno. Este caballero, desconocido para muchos, hizo demasiadas buenas cosas. Cuando muere gente que nunca le ha hecho daño a nadie es triste.

Su obra ha sido grande, sobre todo por que, a mi gusto, acercó la música a Dios - o Dios a la música - algo que siempre me ha interesado.

Este hombre creó uno de los estilos de oración y de vida más interesantes y bellos que existen. En un pequeño pueblo, Taizè, en Francia, montó una especie de monasterio, en donde mucha gente va a orar a Dios o a quien quiera. Algo vital de la vida del Hermano Roger es que no era católico, era de todos los que se sintieran hermanos de él. Roger tenía origen protestante, pero encontró en el ecumenismo la mejor forma de llamar a todo el que quisiera la paz, vivir en paz, sentir la paz.

"Según algunos relatos, una mujer provista de un cuchillo salió de la multitud y atacó al Hermano Roger. Algunos de los presentes la apresaron y la entregaron a la policía. Dijeron que la mujer era rumana.", sigue el artículo, y la noticia es más terrible cuando la leo de nuevo. Me recuerdo del crimen del cura Gazziero, acá en Chile, a manos de un hombre joven, supuestamente satánico.

"La mujer detenida, cuyo nombre no fue divulgado no era "lo suficientemente desequilibrada como para justificar atención psiquiátrica", dijo por teléfono el fiscal Jean Louis Coste." Ven?, por eso me recodé del crimen del cura italiano en plena catedral.

Como decía, la música y la oración se pudieron unir de una forma diferente gracias a este caballero. Yo conocí su estilo de música luego de hartarme de cantar "alabaré alabaré" y "pescador de hombres" en las pocas misas que concurro. La música artísticamente bella, reposada, sensible; simple y compleja a la vez; llena de matices, llena de alma. Un canto que colma el corazón, una especie de mantra, una frase repetida muchas veces. Si somos guturales, la música de Taizé te para los pelos, te emociona. Si nos ponemos místicos, la música Taizé toca el alma. Si nos ponemos cristianos, la música Taizé acerca a Dios.

Pero siendo justos, lo de Taizé también es una experiencia estética, total: visual, auditiva, olfativa, sensitiva y de alma. Los colores del fuego, los aromas del incienso, las melodías y los cantos hacen que cualquier persona que busca la paz la encuentre.

No queda mucho más por decir. Sólo reflexionar sobre lo dura que es la realidad a veces, cuando hombres buenos son muertos por gente que a lo mejor ni sabe lo que hace. Hombres que de verdad llenan de buenas cosas la experiencia de la fe en Dios. Hombres que no caben en ese grupo que tanto despotrican los críticos de la iglesia, los que hablan y abusan del poder o el dinero o de su posición. Roger no era nadie de esos, era de los mejores, de los que a todas luces eran buenos.

"El Hermano Roger, que fue degollado, murió desangrado unos 15 minutos después, dijo el Hermano Emile en entrevista telefónica.", termina el escueto cable que leí en internet.

Roger seguirá inspirando a sus hermanos, qué duda cabe.

Tuesday, August 16, 2005

1:40 de la mañana. Pienso en que debería ir a dormir, pero la mala costumbre no me deja. Quería escribir algo, pero la verdad no sé sobre qué. Quizás sobre lo que dijeron de Juan Pablo Cárdenas, uno de mis profes-maestros de la U: "es un subversivo", dijo Jaime Hales en la presentación de su nuevo libro, que debo leer más por curiosidad que nada. Yo le creí en parte.

Cárdenas, si algo tiene, son principios, es uno de los pocos que ha sabido vivir y llevar el periodismo a un buen puerto, pero obviamente eso de andar por la vida de "periodista" tiene sus bemoles.

Alguna vez JPC me dijo, luego que bromeé sobre un aumento de sueldo, que "el periodismo no es para ganar plata, si quieres ganar plata dedícate a otra cosa." Cuento corto: me vine todo el camino de vuelta pensando en qué me voy a convertir ¿Otra vez cambiarme de carrera?....nica, me respondí

Lo que pasa es que quiero ganar plata, como todos. Tengo algunas ambiciones y sueños que tristemente se logran con dinero. Ahora que lo pienso, quizás no como todos. Pero como la mayoría.

Vengo de una familia en que mis papás se deslomaron por darme una buena educación. Mi papá gastó mucha plata en mi colegio particular y mi carrera anterior. Por eso yo aspiro económicamente a mucho. Para mí una parte del éxito debe estar ligada al dinero. No es malo querer recibir mucha plata por un trabajo que considera bueno, es normal.

Es que, de verdad creo que en esta sociedad "con plata se compran huevos" y yo quiero tener muchos de ellos. Casa grande, auto bueno, muchas cosas. Todos sueños, que con el sueldo promedio de un periodista promedio nunca voy a lograr.

Por eso me propuse ser uno de los buenos periodistas, un poco como Cárdenas, un poco como otros. A esos no les va mal en lo que hacen y ganan lo suficiente para lograr lo que quiero en el aspecto material, que es el tema al que llegué -por fin- de etsa columna.

Otra opción sería casarme con una vieja ricachona y hacerla que se muera para que me dé su fortuna. Tampoco es mala idea, pero no.

Pero quiero ser inteligente. Lo que tengo claro es que debo invertir y ahorrar ahora que estoy ganando algo, terminar mis proyectos de compras personales y ahorrar, meer plata en la bolsa, en fondos mutuos, etc, para así no vivir sólo de una profesión tan poco valorada por el mercado. Espero que me resulte.

Son las 2 y cuarto, mejor me voy a dormir

Saludos

Wednesday, August 10, 2005

EXTRA-EXTRA
A pesar de los rumores que lo dejaban fuera de la cita
SEBA NO COCHONEA Y LLEVA UN PAR DE CALCETINES EXTRA

Luego de meses de ausencia, el cochón más joven de todos, Sebastián Silva, más conocido como "Sebachón", reaparecerá el próximo domingo en el evento del año, la Junta Anual de los Cochones Unidos, en donde se reunirá con la creme de la creme de la cochonería mundial.

"Pongo mi firma, nos vemos el domingo", fueron las cortas, pero certeras palabras del cochón-periodista, al que se había puesto en duda su asistencia: "nunca ha estado en duda mi asistencia, esas son invenciones de la prensa amarilla", afirmó.

Sin embargo, fuentes cercanas al cochón afirman que ese día deberá ausentarse a la ceremonia de apertura de la cita, ya que a esa misma hora comienza sus labores de conductor de noticias.
Ante estos rumores el cochón-periodista dijo que "se están barajando las posibilidades de una salida que convenga a todos, no hay nada concreto en eso, ustedes saben como son las negociaciones. Una cosa, eso sí, puedo confirmar, el domingo tengo una cita con la cochonería unida"

Silva agregó que "llevo dos pares de calcetines", esto en alusión directa al último episodio que protagonizó, cuando en una reunión ampliada de la cohonería, esperó toda la noche un par de calcetines, robados en confusas cirscunstancias.

Esta es la primera vez en muchos años en que la plana mayor de la cochonería se junta en pleno. De ahí la importancia de la reunión, en donde -se rumorea- se discutirá la posible incorporación de nuevos miembros a la organización más importante del cono sur. Por primera vez todos los miembros fundadores no cohonearán.
EXTRA-EXTRA


A pesar de los rumores que lo dejaban fuera de la cita
SEBA NO COCHONEA Y LLEVA UN PAR DE CALCETINES EXTRA

Luego de meses de ausencia, el cochón más joven de todos, Sebastián Silva, más conocido como "Sebachón", reaparecerá el próximo domingo en el evento del año, la Junta Anual de los Cochones Unidos, en donde se reunirá con la creme de la creme de la cochonería mundial.

"Pongo mi firma, nos vemos el domingo", fueron las cortas, pero certeras palabras del cochón-periodista, al que se había puesto en duda su asistencia: "nunca ha estado en duda mi asistencia, esas son invenciones de la prensa amarilla", afirmó.

Sin embargo, fuentes cercanas al cochón afirman que ese día deberá ausentarse a la ceremonia de apertura de la cita, ya que a esa misma hora comienza sus labores de conductor de noticias.
Ante estos rumores el cochón-periodista dijo que "se están barajando las posibilidades de una salida que convenga a todos, no hay nada concreto en eso, ustedes saben como son las negociaciones. Una cosa, eso sí, puedo confirmar, el domingo tengo una cita con la cochonería unida"

Silva agregó que "llevo dos pares de calcetines", esto en alusión directa al último episodio que protagonizó, cuando en una reunión ampliada de la cohonería, esperó toda la noche un par de calcetines, robados en confusas cirscunstancias.

Esta es la primera vez en muchos años en que la plana mayor de la cochonería se junta en pleno. De ahí la importancia de la reunión, en donde -se rumorea- se discutirá la posible incorporación de nuevos miembros a la organización más importante del cono sur. Por primera vez todos los miembros fundadores no cohonearán.
seba...(agregue usted)EXTRA-EXTRA

A pesar de los rumores que lo dejaban fuera de la cita
SEBA NO COCHONEA Y LLEVA UN PAR DE CALCETINES EXTRA

Luego de meses de ausencia, el cochón más joven de todos, Sebastián Silva, más conocido como "Sebachón", reaparecerá el próximo domingo en el evento del año, la Junta Anual de los Cochones Unidos, en donde se reunirá con la creme de la creme de la cochonería mundial.

"Pongo mi firma, nos vemos el domingo", fueron las cortas, pero certeras palabras del cochón-periodista, al que se había puesto en duda su asistencia: "nunca ha estado en duda mi asistencia, esas son invenciones de la prensa amarilla", afirmó.

Sin embargo, fuentes cercanas al cochón afirman que ese día deberá ausentarse a la ceremonia de apertura de la cita, ya que a esa misma hora comienza sus labores de conductor de noticias.
Ante estos rumores el cochón-periodista dijo que "se están barajando las posibilidades de una salida que convenga a todos, no hay nada concreto en eso, ustedes saben como son las negociaciones. Una cosa, eso sí, puedo confirmar, el domingo tengo una cita con la cochonería unida"

Silva agregó que "llevo dos pares de calcetines", esto en alusión directa al último episodio que protagonizó, cuando en una reunión ampliada de la cohonería, esperó toda la noche un par de calcetines, robados en confusas cirscunstancias.

Esta es la primera vez en muchos años en que la plana mayor de la cochonería se junta en pleno. De ahí la importancia de la reunión, en donde -se rumorea- se discutirá la posible incorporación de nuevos miembros a la organización más importante del cono sur. Por primera vez todos los miembros fundadores no cohonearán.

Monday, August 08, 2005

seba...(agregue usted): si..un blog

mi primer posteo, qué emoción, la verdad, uapuap, no sé quien eres,pero gracias..traté de ingresar a tu blog pero me sale error. Así que te quedo debiendo la entrada al normandie, o dime quien eres...o escribe bien tu blog..

seba

Friday, August 05, 2005

seba...(agregue usted)

estoy escuchando un disco que voy a cambiar mañana porque salió malo...hay algo que contar en estas cosas, no?